jueves, 1 de diciembre de 2011

When I look at you


Vuelvo a recordarte, vuelo a mirarte, a sentirte tal y cual como antes, pero aunque crea que todo está igual tu amor hacia mi ya no da para más  

martes, 24 de mayo de 2011

Pasado, Presente & Futuro.

Creo que estaba sentada en la habitual plaza mirando a mí alrededor, cuando las hojas al caer trajeron consigo muchos recuerdos, recuerdos lindos, recuerdos tristes, recuerdos sin  valor. Todo se me hacia familiar creo que ya lo había vivido era tan cercano pero lejano a la vez no supe cómo explicarme bien pero se trataba de recuerdos abandonados en el baúl que decía ”no abrir “, pero creo que las instrucciones nos fueron seguidas porque el baúl fue abierto y todo lo guardado voló.

Dentro de aquel baúl encontré de todo lo imaginado, cartas, fotos, pensamientos, canciones.. en fin sueños rotos, cada uno provocaba distintas sensaciones en mí persona, algunos sacaban esa sonrisa escondida, otros una lagrima oculta y aquellos pocos una ira rebuscada, distintos sentimientos, pero ninguno menos importante que el otro. Al indagar más profundamente en los recuerdos más llamativos descubrí que la gente suele mentir, quizás para evitar que otra gente sufra, quizás para ocultar verdades o quien sabe de puro gusto, descubrí también que hay palabras que no deben salir de tus labios con facilidad, deben costar pronunciarse, un ejemplo de ellas es un “te amo”, aquella palabra tan corta pero tan grande en significado pero a la vez tan mal usada hizo en mi reflexionar y darme cuenta que te amo no se le dice a cualquiera, te amo no se dice para quedar bien, te amo se dice cuando se siente. Descubrí también que a veces hay recuerdos que hace un tiempo te hacían llorar hoy te sacan una sonrisa, ¿será la madurez?, ¿será el tiempo? , quien sabrá, lo único que yo se es que si antes creaban un sentimiento frio en mi, hoy crean un sentimiento cálido y agradable.

Luego de revisar cada recuerdo detalladamente me di cuenta que poco a poco he crecido, he madurado, que he sabido entender las cosas como son, que he sabido levantarme y confiar en mí. Ahora sin más espera estoy tomando todos estos recuerdos y guardándolos en ese baúl nuevamente, para esta vez no ser abierto, ya estoy lista para cambiar de página, para vivir mi vida, mi presente, dejar atrás el pasado y esperar mi futuro, estoy lista para comenzar de nuevo otra historia, otros recuerdos y sobre todo otros sueños que esta vez no serán rotos por nadie, esta vez esos sueños serán cumplidos, esta vez estoy lista para despertar.

martes, 29 de marzo de 2011

Un Niño & Una Flor

Erase una vez un pequeño niño que jugaba con una flor marchitada, el intentaba revivirla, intentaba que volviera a brillar y para lograrlo tomo la decisión de cuidarla todos los días hasta que volviera a estar bien. Y así fue, la flor poco a poco volvía  a tomar su color brillante, eso significaba que el niño estaba haciendo bien su tarea. Pero un día el niño comenzó aburrirse de esperar tanto para que la flor brillara nuevamente y empezó a descuidarla, le prestaba poca atención, a veces la regaba, a veces no y casi nunca le daba cariño, entonces estas cosas produjeron que la flor se volviera a marchitar. Cuando el niño se dio cuenta de lo que estaba ocurriendo se preocupo mucho e hizo todo lo posible para evitar que la flor muriera, pero ya era demasiado tarde, la flor se había marchitado totalmente. Fue ahí cuando el pequeño niño se percato que hubiera sido mejor ser paciente y recibir resultados productivos a ser impaciente y perder algo importante.

lunes, 21 de febrero de 2011

Mi reflejo

19 de noviembre, creo que fue el peor día de mi vida, allí estaba yo sentada frente el espejo observándome fijamente, resaltando cada detalle, mis labios rojos, mis ojos miel, mi cabello castaño, creo que todo estaba en orden, sencillamente todo era igual pero por más que miraba y miraba había algo que me hacía sentir diferente, no podía entender de qué se trataba, que era aquello que había cambiado en mí, hasta que sin darme cuenta, mirándome fijamente a los ojos encontré ese cambio, fue entonces cuando me di cuenta que la imagen del espejo era otra, otra yo una que sinceramente me daba cierto temor. La diferencia entre el reflejo y yo era notable, por una parte ella era responsable, segura de sí misma, sin temor a nada, ella era madura, en cambio yo… yo… soy solo una infantil, indecisa e inmadura chica de 14 años que siempre falla y tiene temor a crecer, si, le tengo miedo a crecer, a algo inevitable, pero es verdad me da miedo, yo quiero seguir siendo esa pequeña chica de 5 años esa que no debe tomar decisiones, esa a la cual todos consienten, esa de la que no se preocupa por nada solo por jugar, sonreír y ser feliz, no quiero ser la chica del espejo, esa que es madura, segura, sabe lo que quiere y tiene sus metas y sueños claros, esa que de seguro va a triunfar, en ese momento comenzaron a caer lagrimas a través de mi mejilla y caí rendida al suelo, no podía parar de llorar estaba dándome cuenta que todo aquello que yo quería ser ya había pasado y era parte de algo que ya había vivido y debía avanzar aunque fuera difícil debía hacerlo, porque pese a todo la chica del espejo también era yo, mi yo escondido la que por mucho tiempo a querido florecer pero mi antiguo ser no quiere irse y dejarla salir.

Después de darme cuenta de todo lo que me estaba sucediendo seque mis lagrimas y me volví a mirar atentamente al espejo pero para mi sorpresa el reflejo esta vez era distinto, mostraba a la misma persona, mostraba a esa segura, madura y decidida chica, pero a la vez también mostraba a la infantil, divertida y cariñosa niña, era una mezcla de las dos, era la que yo quería ser.